En Madrid… Octavio Chacón plasma en el ruedo lo que viene a hacer en Madrid

Pablo Bielsa 14 abril 201914 abril 2019 España, Por Pablo Bielsa

Las Ventas. 14 de abril de 2019. Tradicional corrida del Domingo de Ramos. Tres cuartos de entrada. Toros de Victorino Martín. Fueron nobles en la embestida pero justos de fuerzas y de fuelle, lo que rozó la sosería.

Fernando Robleño: Palmas y saludos.

Octavio Chacón: Saludos y silencio.

Pepe Moral: Pitos y pitos tras aviso.

Detalles:

Octavio Chacón sufrió un corte con el estoque al entrar a matar su primer toro. El diestro entró a la enfermería y corrió su turno, toreando así en último lugar.

Parte médico:

“Sección del aparato extensor del tercer dedo. Bajo anestesia local es intervenido en la enfermería de la plaza de toros. Pronóstico reservado” Dr. Máximo García Leirado

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Fernando Robleño recibió al primero con el capote sacándolo a los medios. El Victorino metía bien la cabeza. Jesús Romero colocó dos pares de banderillas que levantaron la ovación del tendido. Con la muleta comenzó en la contraquerencia para cuidar los vicios del astado. Se fue complicando la faena ya que no consiguió el torero encontrar los terrenos de un toro que aprendió demasiado rápido. El toro no dio para más y entro a matar dejando una estocada entera.

Muy despistado salió el cuarto de la tarde, para Robleño. El animal no transmitió nada, sin embargo el torero se antepuso a la situación con temple y dejó suaves muletazos que animaron a la afición. Lo puso todo de su parte y remató con una estocada caída.

Salió un toro aquerenciado para Octavio Chacón, quien solo sacó a los medios con un temple que emocionó a la plaza. Le colocó al caballo para recibir las varas con buen hacer. El brindis fue para el público con especial saludo al 7, tendido al que tanto gustó este torero en la temporada pasada. La colocación del diestro fue impecable, consiguiendo así muletazos a un toro que requería hacerle las cosas muy despacio. La afición lo valoró. El público comenzó a pasar del aplauso a lo silbido cuando con la espada dejó tres pinchazos. Se llevó sin embargo los aplausos por las ganas invertidas.

Chacón recibió al último de la tarde. Gran trabajo fue el elaborado por Santiago Pérez con las varas, quien intentó poner una tercera. Comenzó en el tercio con la muleta en la mano derecha y en redondo. Lo fue sacando poco a poco y conduciendo la embestida del animal. El toro metía la cabeza de manera correcta pero le faltó empuje. Lo intentó de todas las formas pero la ausencia de fuelle hizo que tomase la espada para dejar una estocada trasera. Descabelló de una.

Fue protestado de salida el tercero, para Pepe Moral. No bajó la cabeza en el peto del caballo. El público se fue apagando poco a poco, intuyendo que no iba a ver una faena digna. Lo tanteó con la muleta para conseguir una embestida que nunca llegó. Tomó los aceros escuchando las protestas de un público que quería algo más. La estocada fue entera tras un metesaca.

Pepe Moral recibió a un toro falto de fuerzas aunque con buenas formas de humillar. Lo sacó a los medios con el capote. En la muleta supo templar unos muletazos con mucha clase. Sin embargo cuando se le bajaba demasiado la seda o se le intentaban ligar más de dos pases, el toro perdía las manos. Con la espada falló de nuevo y el tendido protestó.

En definitiva, una tarde de un domingo festivo, en el que da comienzo la Semana Santa. Las expectaciones e ilusiones eran altas, la meteorología impecable… sin embargo esas expectativas sólo se vieron cubiertas con pequeñas dosis de templanza por parte de Robleño y otras de buen hacer de Chacón. Otro aspecto muy destacado: la afluencia. Da gusto comenzar con la primera corrida de toros de la temporada con una asistencia masiva; y por cierto, mucha gente joven. Porque la Nuestra Fiesta es joven y tiene mucho futuro por delante porque “Hoy he estado en los toros”.

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