En Albacete… Talavante dice: ¡Aquí estoy yo, todavía!

Redacción 17 septiembre 2018 España, Por Jesús Valencia 'Chatino'

Albacete. Lunes 17 de septiembre. Decima y última de la Feria Virgen de los Llanos. Se lidiaron toros de Juan Pedro Domecq y Parladé, justos de presentación y fuerza, descastados, aunque dieran facilidades de manejo. Con casi lleno en los tendidos, ha terminado esta interesante feria albaceteña, considerada por muchos aficionados la mejor de las de plaza de segunda en España.

Julián López El Juli: División en su lote. En su primero aparecieron algunos pañuelos, pero el presidente no otorga la oreja, no entendiendo muy bien esta actitud de algunos toreros, últimamente, de no dar la vuelta al ruedo, para satisfacer a sus “sacapañuelos”.

Miguel Ángel Perera: Ovación en su primero y oreja en su segundo, que tarda en recoger, porque le parece poco, pero el alguacilillo no tiene la culpa.

Alejandro Talavante: Oreja en cada uno de su lote.

Detalle:

Saludó Juan José Trujillo tras parear al sexto

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Abre El Juli la tarde, con un toro dulzón, que obedece bien a las instrucciones marcadas por el de Velilla, de forma que parece necesitar mayor oponente, por lo que la emoción, por lo sobrado, carece de atención alguna, bien sea por el cansancio de la feria, o por no darle mucha importancia a lo que allí está ocurriendo.

Salió con ganas de cumplir en su segundo, que hace cuarto, citándole muy en corto, lo que aparenta ahogar las embestidas, de un toro, al que tampoco pudo sacar nada de importante nota.

Miguel Ángel Perera ve en su primero cómo derriba contra las tablas al caballo, lo deja sin picar, dado ese encontronazo, pero cuando llega a la muleta, se le acaba el fuelle y si le baja la muleta, se derrumba como un “borrachete” de feria, con lo que el extremeño no sabe si subir o bajar (cual gallego), dejando el asunto sin emoción que cautive.

En su segundo, quinto del encierro, se mete entre los pitones, con un trasteo de sube y baja, de quita y pon, nada regular, pero que a algunos “les pone” y sacan los pañuelos, haciéndole creer que ha estado cumbre, lo que el presidente, con buen criterio no piensa, concediendo una oreja por la fuerte petición, pero no la de su opinión personal, lo que provoca el entretenimiento para ir a recogerla, que por poco dan allí “los tostones de Navidad”.

La tarde sube de tono, al salir el tercero, que corresponde a Talavante, que viene fresco, pues torea poco, se pone a citar con elegancia y metiendo los riñones, dejando ver la bragueta al de Juan Pedro, y poniendo a caldo a los asistentes, que ¡Por fin! se dan cuenta de que están en una corrida de toros. Le corta una oreja, y la tarde de fin de fiesta toma cuerpo.

Salió el sexto, muy, pero que muy justito de todo y casi sin fuerzas, por lo que tiene que medir muy bien, consiguiendo equilibrar las pocas embestidas, lo cuadra y mata de una certera estocada, a toro rajado, provocando la sacada de pañuelos para que le otorguen otra oreja y lo saquen a hombros, para así dar algún alivio a los “capitalistas” y que se ganen el jornal.

Gracias, por la amistad y el respeto que estos me merecen.

Despedimos así esta feria, a la que siempre acudimos con alegría (este año hace 51 años que lo hacemos), esperando volver el 2019, si Dios quiere.

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Fotos: Por cortesía de María Vázquez – La Taurino Manchega 2 . @lataurinomanch2