En Pachuca… la apasionada entrega de Roca Rey se estrelló con la mansedumbre

22 octubre 2017 Redacción

En la Plaza deToros Vicente Segura de Pachuca, se dio la segunda y última corrida de Feria, registrando tres cuartos de plaza. Se han lidiado cinco astados de la ganadería de Xajay -dos (quinto y sexto) con el hierro de Villar del Águila, fracción de la ganadería titular-, que resultaron mansos y descastados, presentando diferentes dificultades a los alternantes, sobresaliendo el lidiado en quinto lugar que le correspondió a Diego Silveti, quien no estuvo a la altura de dicho ejemplar.

Fermín Rivera: Gran ovación con salida al tercio y silencio

Diego Silveti: Silencio tras aviso y oreja.

Andrés Roca Rey: Oreja y palmas; silencio en el de regalo.

Detalles:

La licenciada Erika Molina, directora de Innovación Taurina, develó una placa en compañía de Eulalio López El Zotoluco, por haber cortado un rabo hace un año en su festejo de despedida.

_____________________________

El diestro potosino, Fermín Rivera, en esta tarde se encontró con serias dificultades en su lote para recrear el toreo puro que atesora. En su primero ha estado estoico en las verónicas dejando buen sabor de boca, quitó por chicuelinas aunque con cierta distancia entre toro y torero. Ya con la muleta por el lado derecho dejó los mejores trazos de su actuación, sin dejar paras por alto que con la mano izquierda ha estaco correcto pero sin la misma intensidad, por lo que no trasmitió a los tendidos, como ocurrió con la derecha, ya que además el astado siempre terminaba con la cara alta. Quizá su faena debió ser más por el lado derecho y redondearla, para así tener mas fuerza. Lástima grande que pinchara y solo quedaría en una gran ovación que el público le tributó en el tercio.

Con su segundo un ejemplar, que no trasmitió y que simplemente paso y volvió a pasar con mansedumbre, Fermín, intentó todo y mucho más, pero no había nada qué hacer. Finiquitaría su actuación, para quedar en el silencio.

Diego Silveti, quien a cada tarde ha mostrado la decadencia de su toreo, puesto que ya ni siquiera se ve que imite a su padre, se ha visto nuevamente tan falto de estética como de técnica. A su primero de inicio no logró hacerlo quedar asentado en la arena. Después del Caballo haría un quite por medias gaoneras, que a decir verdad, han sido espantosas. Después con la muleta, a dejar un inmenso mar de pases y pases, que dejaron su actuación sin nada que decir, para soportar el silencio del respetable.

Con su segundo astado y como en las ya tantas ocasiones que la suerte le ha dado un buen toro que al final desperdicia, le ha correspondido el astado que más potabilidad tuvo, dejando si bien una faena que si bien ha resultado correcta por la derecha que la misma bondad del público le coreó; poco quedará para el recuerdo, porque ya el joven Silveti es tan simple como el agua; y eso le debería preocupar. Por ello, no se entiende como lo programan tanto, si no se gana las inclusiones en los carteles.

Y de quien esperaban mucho, fue del peruano, Andrés Roca Rey, que en esta tarde dejó una actuación que si bien no fue la mejor de la gran temporada que ha pasado en España, pudo recrear bellos momentos, como en el quite que realizó, logrando darle suntuosa belleza a las caleserinas que fueron muy bien rematadas. Con la tela roja, se gustó y mucho con los trazos por la derecha en su primero, que fueron de excelente factura, ya que por la izquierda, el bovino no dio el juego que requería para lograr consolidar faena alguna. Dejaría tres cuartos de estocada en muy buen sitio, que consiguió hacer doblar al astado de Xajay. El público exigió una oreja que terminarían protestando unos cuantos.

De su segundo toro tanto como el de regalo, estuvo buscando por aquí y por allá, pero se encontró con la piedra de la mansedumbre que le impidió ofrecer más de su brillante tauromaquia.

Al final, queda poco para el recuerdo pues la gente salió decepcionada por el mal juego que han dado los de Xaxay.

__________________________________