En Azores… Rego Botelho y Joâo Pamplona, triunfadores
Plaza de toros de Angra do Heroísmo (Isla Terceira, Azores), sábado 24 de junio. Primera corrida de la feria de Sanjoaninas. Los tendidos de la plaza se cubrieron casi por completo. Corrida de rejones concurso de ganaderías en este orden, de Murteira Grave (desfondado y acobardado), Rego Botelho (bravo y pronto), José Albino Fernandes (reservón y sin entrega), Álvaro Amarante (brusco y a menos), Joâo Gaspar (noble y templado) y Francisco Sousa (encastado y a más). En conjunto, muy desiguales de volúmenes, alzada y cuajo.
Manuel Telles Bastos (casaca marino y oro): Ovación y vuelta al ruedo.
Marcos Bastinhas (casaca azul noche y oro): Vuelta al ruedo y vuelta al ruedo.
Joâo Pamplona (casaca verde botella y oro): Vuelta al ruedo en los dos.
Por el grupo de amadores de Vila-Franca-de-Xira, las pegas corrieron a cargo de Marcio Francisco, Francisco Farinha (al segundo intento) y Rui Godinho; y por el grupo de la Tertulia Tauromáquica Terceirense, de Luis Cunha (a la tercera), Joâo Silva y Luis Sousa “Toní” (al segundo intento), que debutaba con toros. Los tres forcados de Vila-Franca y Toní dieron la vuelta al ruedo. Por su parte, Carlos Viera, del grupo de Terceira, resultó lesionado en una rodilla.
Detalles:
Al inicio de las cortesías se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los últimos incendios en Portugal continental, del matador de toros Iván Fandiño y de dos antiguos forcados de la Tertulia fallecidos recientemente, por los que su grupo lució brazaletes de luto en las chaquetillas.
El jurado designado al efecto concedió los siguientes premios en liza durante la corrida concurso:
Mejor lidia: Joao Pamplona, al toro de José Albino Fernandes.
Mejor toro y mejor presentación: Bandeirote, nº 66, de 532 kilos, negro, de Rego Botelho.
Mejor grupo de forcados: Amadores de Vila-Franca-de-Xira.
Bandeirote, un bravo Jandilla de la ganadería azoreña de Rego Botelho, gana los premios al mejor toro y a la mejor presentación.
El rejoneador terceirense Joâo Pamplona hizo el toreo más destacado y de más puro concepto de la tarde frente a un lote desigual.
El grupo de forcados amadores de Vila-Franca-de-Xira se llevó el premio al conjunto de sus pegas, en competencia con los de la Tertulia Tauromáquica Terceirense.
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Un año más las divisas azoreñas lucieron la bravura y la variedad genética de sus ejemplares en la ya tradicional corrida concurso de ganaderías de la feria de Sanjoaninas, que esta vez, por su excelente presentación y su notable bravura, se llevó de calle el toro de Rego Botelho, de pura sangre Jandilla.
Con ese enrazado ejemplar, que tuvo prontitud, fuerza y entrega en sus infatigables embestidas, no llegó a pasar de discreto el cavaleiro Marcos Bastinhas, más lucido a la hora de lidiar que de clavar ferros y farpas, porque lo hizo casi siempre con poco ajuste y escasa frontalidad.
Se pudo desquitar Bastinhas con el segundo de su excelente lote, pues el quinto fue un murube voluminoso y de pelo colorado de Joâo Gaspar que, sin llegar a humillar del todo por su corto cuello, sí que tuvo temple y hasta clase en su galope tras los caballos, permitiendo al jinete de Elvas mayor cercanía y limpieza en las batidas y en los adornos.
La actuación más redonda de la tarde corrió a cargo del terceirense Joâo Pamplona, que hizo valer siempre su puro concepto, aun con altibajos, ante dos toros de muy distinta condición. Su primero fue un astado reservón y sin entrega de José Albino Fernandes, de origen Domecq, con el que se mostró valiente y solvente en una labor de menos a más.
En cambio, el sexto fue un vareado atanasio de Francisco Sousa que acabó creciéndose y facilitando también que la faena de Pamplona culminara en su punto más alto, siempre atacando por derecho y dejándose ver a la hora de la reunión.
El menos afortunado fue Manuel Telles Bastos, pues su primero, acobardado ya desde su dificultoso embarque y enchiqueramiento , se entableró casi desde su salida al ruedo y acabó echándose, rendido, hasta en tres ocasiones.
Nada pudo hacer con éste el rejoneador de dinastía, pero sí que lució más y mejor ante el cuarto, un fino ejemplar de Álvaro Amarante –ganadería que pasta en la cercana isla de San Jorge- al que lidió con buen oficio y banderilleó de manera impecable a pesar de que el animal se defendió echando la cara arriba en cada encuentro.
En cuanto a los forcados, el grupo de amadores de Vila-Franca-de-Xira se impuso claramente al de la Tertulia Tauromáquica Terceirense por la rotundidad y la maestría de sus pegas tanto con el acobardado toro de Murteira, al que enceló de forma brillante Marcio Francisco, como con los otros dos. Más accidentadas fueron las de los forcados locales, incluyendo la lesión que sufrió Carlos Vieira tras una aparatosa voltereta, pero entre estos cabe destacar el notable debut en corrida de toros de Luis Sousa Toní, una de las más destacadas promesas de la sección juvenil de esta agrupación.
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