En Mérida… Jesús Enrique Colombo, pleno

11 febrero 2024 Redacción

Mérida, Venezuela, domingo 11 de enero del 2024 segunda corrida de toros del serial del Carnaval Taurino de América, en la capital Turística y estudiantil de Venezuela, se lidió un encierro terciado de las ganaderías tachirense de los herederos del Lic. Hugo Domingo Molina, que dieron buen juego y le cortaron siete orejas pero pudieron ser más ya que el Otorrinolaringolo Antonio Suarez, perdio al menos tres orejas por mal uso de la espada.

Francisco Javier Rodríguez: Oreja.

Daniel Luque: Oreja y dos orejas.

Jesús Enrique Colombo: Dos orejas y dos orejas simbólicas.

Antonio Suárez: Silencio tras aviso y palmas.

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Abre plaza el rejoneador yaracuyano Francisco Javier Rodríguez, con un toro de Los Marañones, al que lidió de buenas maneras y que al colocar su tercer rejón de castigo se acercó a la barrera de sombra donde se encontraba su prometida para pedirle matrimonio de manera pública lanzándole la banderola del rejón que llevaba trenzado el anillo de compromiso, luego colocó varias banderillas al compas del pasodoble torero que interpretaba la banda de La Mesa Se Los Indios, que ameniza los espectáculos taurinos en la plaza de toros Román Eduardo Sandía, en esta ciudad andina, despacha a este animal con certero rejón de muerte y Usía concede una oreja.

Daniel Luque, español abre la tanda de lidia ordinaria con un manso que se refugio en tablas donde el de Gerena, fue a buscarlo y con la técnica que lo caracteriza logró hacer sonar la charanga rematando la faena con espadazo y así corta una oreja. Su segundo fue un marrajo imposible de lidiar por lo que el diestro español solicitó permiso para lidiar el sobrero, toro de Juan Bernardo Caicedo el que toreó de manera magistral, remata con un estoconazo que deben tomar en cuenta a la hora de la premiación, corta las dos orejas.

Jesús Enrique Colombo se convierte en el triunfador de la tarde y por qué no de las ferias al cortar las dos orejas de su primero las dos simbólicas al indultar su segundo, un gran toro al que el taribero entendió desde un principio y remató con un gran espadazo de rápido efecto

Antonio Suárez, se llevó el mejor lote al que supo entender perfectamente y realizó dos faenas de gusto refinado para buenos aficionados para borrarlas por no acertar a la hora de matar, de haber matado sus dos toros hubiera cortado al menos tres orejas.

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