En Mont-de-Marsan… Daniel Luque con tres orejas en la 1ª de Feria
Mont-de-Marsan (Francia). Arènes du Plumaçon. Primera de la Feria de la Madeleine. Se lidiaron seis toros de Victoriano del Río y Toros de Cortés (3° y 4°), justos de fuerzas, descastados, con falta de fondo y transmisión. Lleno en los tendidos.
Antonio Ferrera: Silencio y silencio.
Diego Urdiales: Silencio y oreja tras un aviso.
Daniel Luque: Dos orejas y oreja.
Detalles:
El recortador francés Cyril Dunouau hizo un quiebro a la salida del primero y fue arrollado aparatosamente del cual, por fortuna, salió ileso.
Saludaron tras parear de Raúl Caricol con el tercero y Juan Contreras con Alberto Zayas ante el sexto.
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El primero fue recortado por el campeón de Francia Cyril Dunouau, quien fue cogido aparatosamente por el toro, gracias a Dios, todo quedo en un gran susto. El astado, sardo, cómodo de pitones, pero justo en fuerza. Antonio Ferrera quiso estructurar el primer tercio a contra sentido, colocó el Victoriano demasiado lejos, el toro caminó hasta estar dentro de su distancia de embestida. Violento, derribó la montura en la primera vara. Ferrera hizo lo mismo el segundo encuentro.
El Victoriano acudió al paso y salió solo. Buen par de banderillas de Fernando Sánchez. El torero de Badajoz brindó al recortador francés Cyril Dunouau. Inició la faena abusando del pico. La segunda tanda fue un tanto más sincera. El toro fue flojo y descastado.
Se rajó en tablas y volvió allí tan pronto como Ferrera le obligaba. Mató de un pinchazo y una entera baja. Se silencio la propuesta de una faena superficial a un toro con falta de fuerza y de emoción.
El cuarto, un burel de Toros de Cortés, fue mal colocado en suerte por Antonio Ferrera. Y fue mal picado en las dos varas, fue pitado el varilarguero. El toro resultó flojo, inició su trasteo por abajo, como en el primero, Ferrera toreó con el pico. El toro no tuvo motor.
Con la zurda no tuvo muchas embestidas ni transmisión. El de Cortés se apagó rápidamente. Mató de una fea estocada contraria y delantera con uso del descabello. Fue silenciado.
El segundo, con casi seis años, de escaso trapío y con los pitones escobillados. Fue protestado de salida, además tuvo pocas fuerzas. Brindó su lidia y muerte a Juan Bautista. El toro se rajó en tablas desde la primera serie con la mano derecha.
Urdiales intentó volver a ponerlo en los medios, pero su condición de manso, hizo que volvía de pronto al hilo de las tablas. Nada pudo sacar Diego y rápidamente se fue a por la espada. Pinchazo y una entera baja y delantera. Fue silenciado.
El quinto fue un bonito burraco. Salió abanto. Fue bien colocado en suerte por Diego Urdiales, tomó dos varas, pero sin ser muy apretadas por el picador. El diestro brindó al público. Inició su trasteo con doblones y seguido de naturales a un toro ya débil. Dejó buena serie con la derecha, pero el Victoriano perdió las manos.
De nuevo, dejó buenos derechazos, el toro fue noble, pero le faltó transmisión. Con la izquierda, resultó lo mismo. Afortunadamente Urdiales toreó, aunque sin cruzarse, con una grandísima clase. La parte final del trasteo tuvo sus enganchones, pero ya el toro se vino a menos. Mató de una entera ligeramente caída con descabello. Se le otorgó una oreja.
El tercero, fue un astado de Toros de Cortes. Fue correctamente colocado en suerte de varas, pero fue poco y mal picado. Saludó Raúl Caricol tras dos buenos pares de banderillas. Daniel Luque brindó al público. El toro pareció noble. El inicio de faena fue elegante y templado. Muy pronto nos dimos cuenta de que el burel no tuvo mucho que ofrecer al torero.
Luque, adaptó su registro a la condición del animal y estuvo muy profesional teniendo su eco en los tendidos quienes se lo agradecieron. El toro fue a menos, remató con una buena serie de naturales y unas luquesinas. Mató de una estocada concluyente y cortó las dos orejas (generosa la segunda) que le otorgó el palco.
El cierra plaza fue el mejor presentado del encierro. Humilló desde su salida del toril. Tomó dos varas y empujó un poco en la segunda. Saludaron montera en mano Juan Contreras y Alberto Zayas. El toro fue justo en fuerza.
Inició el ultimo tercio a media altura, el Victoriano careció de embestidas. Sin tener mucha emoción con la derecha, y con la izquierda el Victoriano fue tan claro como por el otro pitón. El torero dominó su oponente, pero todo quedo un tanto aburrido por la falta de casta de este astado y quedó muy por debajo de lo que pueda mostrar Daniel Luque. Mató de una buena estocada entera, y cayó otra oreja.
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