Grave cornada sufrida por novillero peruano Rolly Pezo Morales, se pide ayuda
Cotabambas, Apurímac (Perú). El pasado 1° de septiembre mientras iniciaba el trasteo de muleta en la plaza de toros de la localidad, resultó gravemente herido por un astado de Hanampa, el novillero local Rolly Pezo Morales, sufriendo cornada que le ocasionó la pérdida del ojo izquierdo por fractura del lecho ocular con serio compromiso óseo y vascular en la zona craneana, siendo su situación clínica sumamente delicada.
En el transcurso de las horas será trasladado a la ciudad de Lima.
En aquellos pueblos sureños de las altas planicies y mesetas andinas, en las regiones Quechua y Yunga, cuya accidentada geografía escarpada sus pisos más altos bordean arriba de los cinco mil metros, como también de quebradas y estrechos valles, el arraigo festivo que poseen las corridas de toros se viste de matices muy singulares.
Los jóvenes, sumidos entre la cándida inocencia juvenil y el melancólico atavismo del habitante campesino, encuentran en las festividades patronales y locales la oportunidad de hacer gala de sus devaneos cortejanos, lucirse ante los demás o simplemente hacerse destacar en base a su gallardía, arrojo y valor, poniéndose en frente de un toro. Sea bravo, de media casta o cunero.
Rolly Pezo Morales, un torero de 28 años, novillero del que pocos saben, que actúa como seguramente varios de sus pares, por pueblos alejados e inaccesibles conforme se emplazan dentro de la ascendente y difícil geografía andina del Perú.
Solo llevado por esa férrea tenacidad que lo impulsa a trajearse de luces, con su chaquetilla descolorida y bordado modesto, para sortear los agrestes caminos, aquellos donde quizás también esté expenso a hacerle un quite al de las patas negras tanático que le anuncia el largo trayecto previo hacia el ruedo, para plantarle cara a ese toro cuya incierta procedencia muchas veces desconoce.
Como éste de la ganadería local de Janampa que le ha propinado una gravísima cornada al írsele de frente, pese a que el torero estuvo cruzado y que le había advertido pues en el primer paso ya entró apretándolo, nada más tocarlo se le ha echado encima arrollándolo, hacerlo caer y asestarle el golpe en la zona ocular.
Presenta lesión ósea y vascular. Fractura del lecho orbital del ojo izquierdo con pérdida del mismo. Incrustación de astilla ósea dentro de la base cerebral. Su diagnóstico clínico es reservado.
Luego de recibir las primeras atenciones en los precarios servicios médicos locales, fue derivado hacia la cercana Cuzco para ser estabilizado allí a la espera de su traslado en aéreo ambulancia a la ciudad de Lima donde será recibido por el equipo médico a cargo del doctor César Baltazar Mateo, jefe del cuerpo médico de cirujanos taurinos de la plaza de Acho, quien lo ingresará al hospital Sergio Bernales – Collique donde será nuevamente diagnosticado e intervenido, según nos informa a través del hilo telefónico el propio doctor.
Rolly Pezo Morales, que no llega a la treintena con sus esperanzas truncadas, los anhelos sesgados y una durísima lucha personal para sobreponerse de aquí en adelante con miras a su plena recuperación. No contaba con seguro médico alguno, tampoco pertenecía a ningún gremio sindical de toreros. Hijo de una modesta familia, llevado por la necesidad y el deseo indesmayable de abrirse camino en el toro.
De esa misma necesidad de cual se vale la guadaña de la informalidad para echarle mano al momento de organizar los festejos en nuestros pueblos serranos. Cierto es que en esta ocasión sí se contaba con un servicio médico de urgencia y pudo ser trasladado de inmediato. Pero hablamos de las condiciones que muchas veces tienen que ser aceptadas por los actuantes para hacer el paseíllo en estos ruedos.
Culpa de los mismos toreros, ciertamente podría decirse, sin conocer cómo se manejan las cosas en la interna de la organización de los festejos. Cosas que deben tomarse en cuenta pero decididamente. Es muy fácil buscar y señalar responsabilidades y culpas luego de los percances o tragedias.
Eso resulta innecesario salvo que se requiera exacerbar el morbo y la canallesca. Las fatalidades suelen ocurrir y más en esto del toro. Todos los sabemos. Los toreros mucho más. Pero con la misma circunspección con la que actuamos debemos exigir que se tome de una buena vez debida conciencia y se salvaguarden las condiciones mínimas en favor de los toreros.
Nos comunicamos con el torero Valentino Gamarra quien se está encargando de canalizar toda la ayuda y coordinación al respecto, manifestándonos que mucha gente del toro, desde figuras mundiales, hasta aficionados desde Inglaterra, Suiza, España y otras partes del mundo taurino se vienen interesando por el estado de Rolly.
El lunes reciente, trascendió que una figura mundial top actual nacido en Lima, ofreció su ayuda y se ha puesto desde el primer momento al pendiente de la situación, llamando incluso personalmente desde España constantemente pero que ha pedido no mencionarlo, aunque como digo, ayer trascendió en las redes sociales de quién se trataba. Adicionalmente, hay dos figuras del toreo que también han comprometido su ayuda que piden se les mantenga en reserva.
Para cualquier tipo de ayuda, se pide comunicarse al Perú, vía WhatsApp:
+51 965882359 Valentino Gamarra.
¡Pronta recuperación torero!
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Fotos cedidas gentilmente por Miguel A. Pardo
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