En Boujan… Clemente Jaume a hombros
Arènes de Boujan. Francia. Primera novillada picada de la Féria 2024. Medio aforo. Viento, no llovió pero no hizo mucho calor al final de la novillada. Tres novillos de Turquay -3º, 4º, 5º- y tres de Valverde. Nueve puyazos, caballería Bonijol.
Jesús Moreno: Silencio y saludo a petición de la familia con aviso.
Clemente Jaime : Oreja y oreja.
Cid de María: Silencio y oreja.
Detalles:
Presidente: Sr. Gleyze
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Clemente Jaume salió a hombros de la primera novillada de la Féria de Boujan. El local del planteamiento a la entrega y el coraje, pero el corte de la oreja del quinto es cuestionable. Jesús Moreno, tras su lesión en Madrid, está completamente desconfiado y mermado físicamente. Cid de María es un torero interesante, lástima que picó demasiado a su Valverde.
Los verdaderos ganadores de esta novillada son los novillos de hierro francés de Turquay y Valverde. Bien presentados, con poder, lamentablemente, no fueron aprovechados ni destacaron los novilleros.
Los novilleros
La faena de Jesús Moreno a su primer Valverde fue superficial. El torero no aprovechó todo el potencial de su oponente. La suerte suprema fue laboriosa. Totalmente desconfiado, Moreno balbucea su toreo ante un Turquay que, sin embargo, lo permitió. Saludó a petición de su familia. Evidentemente el novillero no se ha recuperado ni física ni psicológicamente de su lesión en Madrid.
El segundo Valverde fue noble y exigente. Algunos buenos pasajes en la faena de Clemente Jaume, pero la faena estuvo por debajo del potencial del buen novillo. La espada fue buena, la puntilla no. Oreja. El quinto, Turquay, fue rápidamente avisado porque el novillero lo toreaba sin darle longitud a la embestida. Demostró lo que es inaceptable con una Santa Coloma. En un contexto peligroso Clemente Jaume se entregó, demostró valentía. Mató mal y aun así le cortó una oreja (sic).
El tercero, Turquay, fue justo de fuerzas y difícil por la izquierda. Se fue rápidamente a menos. Cid de María se entregó pero el toro no ofreció opciones. Silencio. El último, un respetado Valverde, fue masacrado en varas con la complicidad de Gómez Escorial. Unos buenos muletazos de Cid de María pero deberíamos haber visto algo más dada la nobleza del toro. Una oreja generosa.
Los novillos
Para la primera novillada de la Feria 2024, los organizadores de Boujan propusieron un concurso entre las ganaderías de Manu Turquay y Jean Luc Couturier. Ya fueran Santa Coloma o Conde de la Corte, los novillos del día estuvieron bien presentados. Destacaron el número 14 de Turquay y el 48 de Valverde. Lamentablemente el primero quedó casi inédito al estar mal lidiado por Jesús Moreno. Mientras el Valverde fue masacrado con una pica por demasiado cornadas al peto. Y, sin embargo, cargó humillando a la muleta de Cid de María, quien puede agradecer a su peón de confianza Gómez Escorial haberle privado de un toro de dos orejas. Los demás novillos salieron muy interesantes pero poco aprovechados por los toreros.
Novillo a novillo
Valverde Número 57 para Jesús Moreno
El primero fue astifino. Se defendió en el capote de Jesús Moreno. El novillero luchó por ponerlo en suerte. El toro estuvo mal picado, dándole dos puyazos sin emplearse. Mucho capotazo para un segundo tercio de mala calidad. Empezó con doblones, el toro tenía un buen pitón derecho. El novillero no se cruzó. Por la izquierda, el bicho estuvo falto de recorrido. A la faena le faltó intensidad e interés. Moreno pinchó varias veces antes de matar con un bajonazo. Silencio.
Valverde Número 63 para Clemente Jaume
El segundo, Valverde, fue serio en presentación. Clemente Jaume se esforzó por situarlo. La primera pica fue trasera y el toro empujó. Toma el segundo puyazo con bravura. Nuevo segundo tercio laborioso, el toro merecía algo mejor. El novillo fue noble, embistió con alegría y repitió. El novillero tiró del toro para una buena serie cruzándose por la derecha. El toro, encastado, se mostró exigente. A la izquierda, el novillero no pesó lo suficiente sobre el animal. El novillero se entregó pero estuvo por debajo del potencial del toro a cuya embestida no le daba la largueza suficiente. La espada estuvo en su lugar. Oreja.
Turquay Número 31 para Cid de María
El tercero fue un Turquay muy en el tipo de Buendía. Remató en las tablas antes de que Cid de María lo fijara. Justo de fuerza, el novillo era tardo y sólo acudió a una pica. El toro, apagado, se revolvía rápidamente por la izquierda al inicio de la faena. Por la derecha se dejó llevar un poco más. El novillero entregado pero la faena no transmitió. El Turquay fue a menos. Nuevo intento por la izquierda, el toro siguió sin pasar. La espada casi entera quedó baja. Silencio.
Turquay Número 14 para Jesús Moreno
El cuarto, Turquay, bien presentado, puso en dificultades a Jesús Moreno a la hora de sujetarlo en el capote. El piquero lo masacra en el primer encuentro. Lo mismo ocurre con el segundo. La cuadrilla siguió igual de mala. De principio a fin la faena ha sido catastrófica. El novillero desconfiado y retrocedía en cada pase. Sin embargo, el toro lo permitió. Quedó inédito. La suerte suprema fue laboriosa. Saludó por el apoyo familiar (aviso) incongruente ante una faena de poco contenido.
Turquay Número 6 para Clemente Jaume
Clemente Jaume recibió con una larga de rodillas a un bien presentado Turquay. El toro era justo de fuerzas. Se empleó bajo el peto durante el primer y único encuentro. Inició la faena por cambiadas y pases de pechos, el toro no siguió el engaño e hizo por el torero. Volviendo a cosas más clásicas por la derecha, mientras el torero mantuvo al Turquay cerca de él al final del pase, el toro vio una luz y buscó al torero. El de Turquay se volvió peligroso. El torero mostró coraje en la faena. Tanto a la derecha como a la izquierda se entregó. Se entrega con la espada pero quedó caidita. Nueva entrada a matar, el resultado fue el mismo. El público exigió y recibió una oreja cuestionable considerando la espada.
Valverde Número 48 para Cid de María
El último, Valverde, fue el mejor armado de la novillada. Puso en dificultades a Cid de María, capote en manos. Fue Gómez Escorial quien supervisó la lidia. Dos veces el toro estuvo mal y demasiado picado y aun así el toro empujó. El segundo tercio resultó catastrófico. El prólogo de faena fue por doblones, el toro resintió el exceso de castigo del primer tercio. Tanto por el lado derecho como por el izquierdo el bicho ha sido noble y humilló. La faena podría haber sido diferente si el toro no hubiera sido asesinado con una pica excesiva. Lástima porque al novillero, como Valverde, no le faltó calidad. La oreja solicitada y obtenida también es cuestionable.
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