En Valencia… Afortunadamente Roca Rey

Thierry Reboul 16 marzo 202417 marzo 2024 España, Por Thierry Reboul

Valencia. Sábado 16 de marzo 2024. 6º festejo de Fallas 2024. Lleno de “No Hay Billetes”. La primavera está llegando. Toros de Victoriano del Río, toros sin raza ni fondo. Trece picotazos y una caída.

Sébastien Castella: Saludos y silencio aviso.

Andrés Roca Rey: Silencio con aviso y oreja con dos avisos.

Pablo Aguado: Saludos y silencio con aviso.

Detalles:

Saludos de José Chacón y Luis Blásquez y buena brega de Rafael Viotti en el cuarto.

Presidente: Pedro Valero

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Hoy en Valencia estuvo un torero en la plenitud de su arte, Sébastien Castella, un torero con un poder casi infinito, Roca Rey y un muy buen artista, Pablo Aguado. Sin embargo, estuvimos sumamente aburridos por culpa de seis toros sin raza ni fondo de, Victoriano del Río. Sólo el peruano, con el único toro que tenía unas -muy poquísimas- posibilidades, pudo sacar al público del aburrimiento.

Los toros

Desigual y justa en presentación ha sido la corrida de Victoriano del Río -encaste Domecq- será una que olvidaremos incluso antes de que se vuelva a llevar a cabo. Sin raza, justos de fuerza, el módulo de transmisión no se entregó con los toros de esta corrida valenciana.

Los toreros

El primero fue un manso con nobleza. Malo al caballo, respondió bien a los cites de, Sébastien Castella, por la derecha en la salida de faena. El de victoriano bajó el tono y su falta de raza hizo que la faena, aunque tuvo buenos pasajes, se fuera a menos. A pesar de un espadazo rápido, el francés tuvo que contentarse con un cálido saludo.

Siempre resulta molesto ver a un gran torero enfrentarse a un toro sin raza ni clase. De cara al cuarto, Castella demostró que está en buena forma, que quiere contender en esta nueva temporada.

Lo mismo ha ocurrido con, Roca Rey, tuvo un toro sin transmisión y sin raza no pudo concretar una buena faena. Para variar, el peruano mató mal a su primero de Victoriano del Río. El peruano es como el otro torero de Gerena, capaz de inventarse una corrida cuando hay un burrito en la pista. Con mucha técnica y experiencia hizo el trabajo y le cortó una oreja a un Victoriano que fue más soso que noble.

Con un toro noble pero de embestida corta, Pablo Aguado, tuvo algunos detalles bonitos pero le faltó la emoción de una faena de entrega, frente a un toro al que, por otra parte, le faltó demasiada sustancia, saludó. Historia interminable, mismo tipo de toro y mismas consecuencias en el sexto.

Frenoso para Sébastien Castella

El primero de Victoriano del Río fue serio de presentación. En la capa de, Sébastien Castella, se mostró suelto y distraído. Sus intenciones no son las más agradables cuando el francés le puso en suerte. Al caballo, salió suelto el primer breve encuentro. Huyó del segundo al sentir la puya y le dejó una ración al tercer encuentro cuando el piquero logró arrinconarlo. Roca Rey, abrió la confrontación en el quite, con tafalleras. Castella respondió con chicuelinas que hizo levantar a las gradas. Desde el final del primer tercio, el toro ya estuvo aplomado, casi parado. Tras el brindis a Enrique Ponce recibió una gran ovación.

Inició la faena clásica por doblones, el matador le tomó la medida a un toro manso pero noble. Continuó con una serie de derechazos muy bonita que hizo sonar la música. Mucha clase y poder en las tandas de derecha que siguen, el francés tomó la mano izquierda. En esta cima, el toro está menos comprometido y comienza a querer huir. El victoriano fue a menos y se aquerenció en las tablas. El final ha sido reduciendo los terrenos para luego torear por redondos, Castella fue en busca de la espada. La estocada quedó trasera y caidita. Saludos.

Empresario para Andrés Roca Rey

El segundo ha sido objeto de ligeras protestas. El toro humilló en el capote de Roca Rey. Tardó en acudir al primer puyazo mientras se defendió le hicieron la carioca. El segundo encuentro fe anecdótico. Al toro le faltó ritmo en el segundo tercio. El peruano inició su faena con pases por alto. El de Victoriano fue simplemente justo de raza. Roca Rey le impone su toreo “presionando”. El bicho respondió sin mucha convicción. Fue sacando poco a poco los derechazos que carecieron de transmisión.

A la izquierda, se detenía e iba con la cabeza alta, sólo con medios pases. Se escucharon división de opiniones en la grada, la faena careció de interés pese a la técnica del peruano. Lo que hizo estuvo bien hecho pero el público cayó en el aburrimiento, incluso cuando el matador optó por ceñirse en un toreo encimista, siguió dividiendo los puntos de vista en las gradas. Un pinchazo hondo precedió a varios pinchazos hondos. Sonó un aviso, un tercio de espada y dos descabellos concluyeron una faena que no será recordada.

Aldeano para Pablo Aguado

El tercero también fue protestado. Metió la cabeza en la elegante capa de Pablo Aguado mostrando debilidad. Al chocar con un pitón el peto, envía a caballo y picador a la lona. La preparación para el segundo encuentro fue muy bonita. El segundo puyazo no supone problema, el toro tiene una embestida cada vez más corta.

El inicio de faena ha sido por trincheras suaves, el toro fue noble pero casi sin casta. Los derechazos fueron suaves pero el toro no transmitió nada porque era demasiado débil. Aguado rápidamente tomó la mano izquierda. Los detalles son elegantes pero… el torero dejó recuperar el toro. Los dos derechazos siguientes son mejores que los siguientes que resultaron enganchados. El de Victoriano del Río se fue a las tablas y el sevillano acabó yendo por la espada. El estoque quedó casi completo y bajo pero suficiente. Media espada para concluir. Saludos.

Cóndor para Sébastien Castella

El cuarto salió suelto. Sébastien Castella le dio tres buenas chicuelinas. Fue poco picado, levantó rápidamente el palo, pero movió el caballo en el primer encuentro. El segundo fue un picotazo simple. El de Victoriano embistió con la cabeza en alto y se detuvo en la capa del francés. En el segundo tercio, pese al capote profesional de Rafael Viotti, huyó. Esto no impidió a José Chacón y Luis Blásquez brillar con eficacia y clase en banderillas. El de Béziers inició su faena con pases por alto sin perder un centímetro de terreno. El toro embalsama pero lo hace con cierta violencia. Primeros derechazos, el matador baja la mano.

Al Victoriano falto de clase, no obstante, Castella la tiene a raudales y los primeros naturales son la demostración de ello. Toreando tranquilamente y dándole tiempo al toro, continuó con derechazos. Mucha seguridad y poder sobre el animal, lástima grande que cada vez se volvió más reservón. La faena a pesar de los esfuerzos y el dominio del torero fue a menos, el de Victoriano mostró cada vez más interés en las tablas donde Castella lo mató. Silencio.

Jaceno para Andrés Roca Rey

El quinto estuvo correctamente presentado, sin embargo, fue distraído y pareció buscar un “amigo” en las gradas. Sólo puso un pitón en el primer encuentro. El segundo fue más que anecdótico. Durante el brindis, al toro se le quedó la cabeza atrapada en un burladero. Liberado, sin haber sido picado, sacó una lengua de dos metros de largo. Roca Rey sabía que había que dar mucho espectáculo porque sino el público se iba a quedar dormido.

Comenzó la faena de rodillas citando de lejos a un toro que tenía un poco de nobleza y recorrido, pero que no tuvo transmisión. A la izquierda, la embestida del toro fue aún más corta. Roca Rey es un buen torero pero con este tipo de toros, aburren. El peruano hizo bastante bien el trabajo -y el espectáculo- consiguiendo hacer creer que el toro iba a más. El público le ama. El final en terrenos cortos y al público le adoró. Llegó un aviso para recordarle que la faena duró más de lo autorizado. La espada entera fue contraria. El toro tardó en caer y sonó un segundo aviso. Los pañuelos florecen con blanco intenso en los tendidos y cayó una oreja.

Bochonorso para Pablo Aguado

El sexto fue muy justo para una plaza de primera categoría. Además de haber estado suelto era débil y tenía dificultades para mantenerse en pie, sobretodo, si se le obligaba demasiado. Sólo puso un cuerno en el primer encuentro sin ser realmente picado. Tres bonitos lances y una media para poner en suerte al victoriano salió huyendo sólo con el contacto con el hierro durante el segundo encuentro. Qué clase cuando Pablo liga una serie de chicuelinas puntuando con una media en cámara lenta.

El de Victoriano tuvo nobleza y media embestida. Pablo Aguado lo toreó con suavidad y a media altura. La música suena en la tercera serie. Lo hace muy bien pero hay poca emoción porque el toro no transmitió nada. ¡Qué pena! El gatito se extinguió por completo al final de faena. Silencio después de una muchos fallos con el acero.

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