En Beziers… Aburrimiento total en el redondel

15 agosto 2023 Pierrick Charmasson

Arènes de Béziers. Feria de Agosto. Más de tres cuartos de aforo. Calor abrasador. Toros de Miura. Pesos toros: 640, 620, 590, 580, 640, 615. Caballería Bonijol. 12 picas

Manuel Escribano: Saludos y silencio tras aviso

Rubén Pinar: Saludos y saludos

Alberto Lamelas: Silencio y división de opiniones tras dos avisos.

Detalles:

Presidente: Mr. Daude

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¡Esto es seguro!, este festejo no lo recordaremos en 40 años. Cuatro décadas después de la histórica Miurada del 14 de agosto de 1983, por la que se homenajeó en el prólogo del festejo a, Richard Millian y a Eduardo Miura hijo, la corrida de los vecinos de Zahariche, de este día, no quedará en los anales, mejor, preferiríamos olvidarla rápidamente.

Muy bien presentados, todos en el tipo morfológico de la casa, pesados -615 kilos en promedio-, armados, escobillados, altos y largos como trenes de carga cuyos vagones, lamentablemente, estaban vacíos. Los Miura del 15 de agosto de 2023 no fueron buenos, no desarrollaron casta ni bravura. Presencia, por el tamaño, pero sin provocar ninguna emoción.

Todos ellos fueron discretos en su comparecencia con los piqueros, empleándose poco o nada; el batacazo provocado por el último ni siquiera será el árbol que oculta el bosque…

En el último tercio, la mayoría desarrolló el sentido habitual de la casa, complicado sin ser diabólico, con pocos pases ciertamente, pero aprovechable a grandes líneas.

Decepción también hubo entre los hombres a los que ya hemos visto con más ideas y recursos.

En resumen, si me sigues, el completo aburrimiento.

Manuel Escribano, después de un tercio de banderillas bien recibido por la gradería, sobre todo, por un ajustado quiebro al violín, realizó una primera faena perezosa a un Miura tan largo como un día interminable, plácido y de poco caminar, moviéndose frente al señuelo sin humillar. Imposible resultó a la izquierda. Entera caída.

Su segundo, mal picado en dos comparecencias. Sin nada, simplemente se dejó llevar, en el inicio de faena, en el centro del ruedo por cambiadas, después dos series que impactaron favorablemente. En un derrote violento, el torero de Gerena sintió el viento como si fuera bala de cañón y perdió en ese momento toda la confianza que generó un buen comienzo. El asunto se marchitó, perdiendo el andaluz el hilo antes de concluir con la espada en el segundo viaje.

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Rubén Pinar, autor de un triunfo colosal en 2022, no llevó al público biterrois a aquel buen recuerdo. El albaceteño tuvo en suerte dos adversarios que ciertamente no eran muy cómodos, pero que tampoco eran dragones escupefuegos…

Rubén Pinar toreó con mucha voz y poca potencia, se mostró prudente en un toreo de forma muchas veces periférico. Por una buena estocada, el respetable reclamó una oreja al final de su primera faena, que el palco con toda razón se negó a conceder.

El torero albaceteño planteó ante su segundo estimables derechazos en una serie de poca son y dejó en el Plateau de Valras el traje tan blanco como el blanco, lo cual, reconozcámoslo, es bastante inusual cuando se habla de una Miurada…

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Alberto Lamelas no está pasando por el mejor momento de su carrera y se empieza a notar. Jamás cuestionaría la voluntad del andaluz al medirse con este tipo de rivales, pero hoy el oriundo de Cortijos Nuevos, también toreó con voz muy fuerte, descargando constantemente la suerte; y haciendo pasar a sus contrincantes, por más complicados de lo que eran en la realidad.

Su segunda faena fue, al inicio, en mejor tono, embarcando en definitiva algunos derechazos de buena factura, antes de devolver poco a poco el terreno de juego al Miura. Exceso de desplantes no deseados y sucesivos desaciertos con la espada.

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