En Almendralejo… Todos en hombros en el Happy Birthday del Matador Reina

01 abril 2023 Redacción

Almendralejo (Badajoz). Corrida goyesca. Lleno. Toros de Juan Pedro Domecq, mansos de embestidas muy comedidas; el quinto premiado con exagerada vuelta al ruedo, muy justillos de presencia y muy cómodos.

Luis Reina, quien reapareció por su feliz cumpleaños: Dos orejas y dos orejas.

Alejandro Talavante: Ovación y dos orejas y rabo.

Emilio de Justo: Dos orejas y dos orejas.

Detalles:

Después de banderillear al que abrió plaza Fernando Sánchez y Juan Luis Moreno fueron ovacionados.

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Luis Reina reapareció el día de su feliz cumpleaños; el número 65. Qué bien por él se pudo dar el gusto de hacer lo que tanto ama, el toreo. Y, como dirían The Club Taurino of London & New York City Club Taurino: ¡Happy birthday Matador Luis Reina!

Cumplió su maravilloso sueño y para ello se seleccionó un encierro proveniente de la ganadería comercial de Juan Pedro Domecq hacedor del toro gentil y de caminar comedido, dócil.

Y, así tuvo un lote con el que pudo estar a gusto. Estuvo lanceando con brillo y después del recorte con la media, todos estaban convencidos y emocionados.

La faena destacó fundamentalmente por el lado natural lo que creció en entusiasmo en el tendido. No ofició con certeza el acero, un pinchazo, un espadazo y un descabello. El público exigió dos orejas y el presidente acudió en consecuencia.

Su segundo tuvo ciertas complicaciones propias de la mansedumbre, pero nada que la experiencia del sexagenario no pudiera superar. Después de la estocada exigieron otras dos orejas y eso volvió a conceder el presidente.

Estuvo en el cartel, Alejandro Talavante, quien hizo dos faenas pulcras, correctas a dos bondadosos juanpedrines. Con su primer mansillo, después de verónicas cumplidoras y un quite por gaoneras emulando a José Tomás, la faena estuvo bien realizada, el ambiente era el propicio para triunfar con lo que ocurriera. Pero estuvo mal con la suerte suprema y todo quedó en la ovación.

Se desquitó con el quinto al que le hizo una faena que convenció a la asistencia, las series con ambas manos enloquecieron al tendido y después de la espada, le dieron dos orejas con el rabo.

Emilio de Justo fue el tercio del cartel con su toreo artístico de suma calidad, y con estos toros tuvo la facilidad para construir dos faenas de vistosa arquitectura. Con su primera faena lo más difícil lidiar fue la ventisca, y superó la injerencia climatológica dejando algunas series interesantes. Buena estocada y dos orejas.

La mansedumbre del sexto tuvo como elemento la sosería, a pesar de ello, Emilio sacó provecho convenció a la muchedumbre y después de la estocada le dieron más orejas.

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