En Illumbe… Puerta Grande para el gran Roca Rey; y maestría de Ponce

Illumbre (España). Martes 14 de agosto. Semana Grande. Toros de Victoriano del Río y Toros de Cortés (1º). En líneas generales los toros han sido desiguales, bajos, apretados de carnes, serios y algunos con poca presentación. El segundo toro de la tarde fue devuelto por problemas físicos. El cuarto de la tarde llamado Jara fue aplaudido en el arrastre. El quinto de la tarde fue ovacionado en el arrastre. La entrada ha sido de media plaza.

Enrique Ponce: Ovación, Ovación y Oreja.

Andrés Roca Rey: Oreja, Dos orejas y Ovación.

Detalles:

Tuvo que desmonterarse Iván García por sus dos grandes pares a el segundo de la tarde.

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Salió el primer toro de la tarde, que le tocó en suerte a Enrique Ponce, el cual lo recibió con el compás abierto y administrándole unas verónicas muy cadenciosas. En el tercio de varas el oponente se dejó pegar pero sin empujar demasiado. El quite de Roca Rey fue como un volcán en erupción, le recetó unas chicuelinas muy ajustadas, que hizo que el respetable reunido allí aplaudiera con fervor.

La faena de muleta alcanzó su mayor plenitud al final. Ponce le recetó unas tandas por ambos pitones excelentes y adornándolo con su sello personal, con sus cambios de manos tan particular en él. A final de faena le administró unas tandas por pases circulares por la espalda. Ponce quiso rubricar lo expuesto y enterró el acero, que fue suficiente para que el oponente doblara. El respetable pidió el trofeo que no fue concedido.

El segundo toro del lote de Enrique Ponce, no se dejó torear con el capote. En el tercio de varas el enemigo metió la cara abajo y empujó, recibiendo dos buenos puyazos. El prólogo de la faena estuvo marcado por la probaturas por ambos pitones. Ponce se fue acoplando y sobando la embestida y logró alguna tanda muy buena al natural. Al final de faena Ponce se puso muy de verdad, dándole el pecho y llevándolo lo más largo posible, con mucho peligro el oponente llegó a tirarlo pero por suerte no llegó a cogerle. Entró a matar y dejó una buena estocada aunque baja y contraria, pero fue suficiente.

El quinto y último toro de la tarde para nuestro ya conocido torero de Chiva, Enrique Ponce, el cual lo recibió a pies juntos dibujándole unas preciosas verónicas, con un remate muy torero. El oponente no se empleó mucho en el jaco. El quite de Enrique Ponce fue de cartel de toros, con unas chicuelinas a manos bajas. La respuesta de Roca Rey fue arriesgada por caleserinas.

El inicio de Enrique fue sensacional, con mucho sabor por genuflexiones con mucha profundidad. A continuación trazó con la mano derecha unas series de calidad, con su típico toreo desmayado como un lirio. Al natural toreando con el alma, abandonando el cuerpo y llevándolo muy largo. Consolidó una gran faena de triunfo gordo. Al entrar a matar pinchó, pero a la segunda dejó un estoconazo aunque tuvo que tirar de verduguillo.

Y se corrió turno al sexto de la tarde, debido a que el segundo se lesionó y fue devuelto. Andrés Roca Rey no pudo hacer apenas nada con el capote, debido al comportamiento del enemigo. El oponente en el jaco empujó con alegría y se arrancó dos veces, aunque recibió dos picotazos. Enrique Ponce hizo el quite por delantales y lo remató con mucha torería dejando una larga cordobesa.

El inicio de faena estuvo marcado con su sello tan personal en mitad del ruedo con pases cambiados por la espalda, con un punto de tremendismo. Seguidamente trazó con la mano derecha unas tandas muy buenas dejandole la muleta cosida al hocico y ligándolo. Por el pitón izquierdo del toro no pudo hacer nada Roca Rey, el toro no pasaba casi y lo desarmó en varias ocasiones. El final de faena estuvo marcado por el arrimón tan peculiar con un desplante muy torero. Entró a matar con mucha determinación e hizo que el oponente cayera fulminante. El público reunido pidió la oreja fuertemente y el presidente la concedió.

Y salió el cuarto de la tarde para el torero peruano Andrés Roca Rey, el cual no le pudo hacer apenas nada de salida a su oponente con el capote. En el varilarguero el enemigo se empleó, empujando y arrancándose con alegría. El prólogo de la faena de Roca Rey fue rodillas en tierra en el medio de los ruedos dejando pases cambiados por la espaldas, de rodillas  y con la mano derecha dejó unos buenos derechazos metiendo los riñones. Seguidamente ya de pie, dejó tandas por el pitón derecho impresionantes. Roca Rey trazó con la mano izquierda tandas muy largas y llevándolo lejos. El final de faena se expuso el peruano por manoletinas. Roca Rey quiso rubricar lo expuesto dejando una buena estocada. El respetable pidió con fuerza los trofeos y el presidente las concedió.

Y salio el cierraplazas para el peruano Andrés Roca Rey, el cual lo recibió dibujándole unas preciosas verónicas a pies juntos. En el varilarguero el oponente se dejó pegar y empujó. El prólogo de la faena estuvo marcado por los pases a pies juntos, seguidamente y sin probaturas trazó tandas con la mano derecha llevándolo lejos, con mucho poderío y firmeza. Por el pitón izquierdo dejó tandas largas, exigiendo al toro y poniéndose de verdad. El final de faena por bernadinas fue de los más ajustado de la tarde. A la hora de entrar a matar dejó más de media estocada que fue suficiente.

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• Foto: Javier Hernández

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@_tauromaquia_si

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