En Madrid… Oreja a Borja Jiménez por su toreo de mando, ambición y emoción

05 junio 2025 Miguel Ángel Herráiz

Crónica de Miguel Ángel Herráiz

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Madrid. Las Ventas 5 de junio de 2025. La empresa me informó que volvieron acudir 22.964 aficionados. Vigésimo cuarto festejo de la Feria de San Isidro con toros de Jandilla, colaboradores, con buena presencia y opciones de triunfo, salvo el quinto bis. Los toros: Primero con desplazamiento y sin terminar de colaborar. Segundo con buen tranco y lucido pitón izquierdo. Tercero bravo con transmisión. Cuarto con recorrido y dejándose. Quinto devuelto. Quinto bis fuerza justa y defendiéndose. Sexto con movilidad y escasa transmisión.

Sebastián Castella: Silencio tras aviso y vuelta al ruedo tras aviso.

José María Manzanares: Silencio en su lote.

Borja Jiménez: Oreja y silencio.

Detalles:

Borja Jiménez salió a por todas frente a su bravo primero, ganándole terreno con el capote, pasándoselo por abajo en ambos pitones, mandando, transmitiendo con la muleta y rubricando con el estoque; su otro toro careció de la entrega necesaria para obtener trofeo. Sebastián Castella estuvo a gran nivel con la muleta en su segundo, el otro no terminó de colaborar. José María Manzanares cuajó importantes muletazos por el izquierdo, su segundo bis se defendió y dio poca opción.

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Orden de lidia -sorteo-

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Prólogo

Festejo vigesimocuarto de la Feria de San Isidro con toros de Jandilla que dieron opciones de triunfo. Borja Jiménez vino a por todas, decidido a ratificar anteriores triunfos con su toreo de mando, hondura y sentimiento, ganando terreno en el capote, pasándoselo por abajo, transmitiendo y rubricando con la espada. Cortó oreja en éste y de haber colocado la estocada arriba, en vez de algo delantera, se estaría hablando de Puerta Grande con un solo toro. En el otro, con movilidad y escasa transmisión, conectó con el público en un vibrante inicio de rodillas con la muleta, que fue algo a menos por la condición del astado al que le arrancó excelentes muletazos.

Sebastián Castella toreó con intensidad a su segundo en la muleta, se metió entre los pitones llevándolo por donde él dispuso, tuvo la mala suerte de no manejar el estoque al mismo nivel que el resto de la faena; si así hubiera sido los trofeos estarían bajo su custodia. En su segundo los enganchones deslucieron su tarea. José María Manzanares cuajó importantes muletazos por el izquierdo a uno con buen tranco que colaboró, su segundo bis, con justeza de fuerza, terminó defendiéndose.

El Festejo

El primero de Castella se coló por dentro en el primer capotazo, obligando a saltar la barrera para evitar males mayores. Fue cuidado en varas. Con la muleta, en las primeras series, por el derecho se desplazó con codicia y fijeza. En el tercio por el izquierdo solo los admitió de a uno y alguna vez de a dos. Tuvo nobleza en la embestida, movilidad, a veces punteó y le faltó la entrega necesaria para poder transmitir. Mató de estocada. Escuchó un aviso. Silencio.

Su segundo lo brindó al público. Con la muleta inició en el tercio por estatuarios mostrando el buen tranco y ritmo del toro. Por el derecho bajó el engaño, ligó mandando, finalizando con cambio de mano para rematar la tanda. Por el izquierdo la faena fue a más llevándolo a media altura en series largas, sin moverse del sitio, reunido, con muletazos de excelente ejecución y aguantando algún peligroso parón.

Finalizó dándose un arrimón entre los pitones, llevándolo con lentitud, mando, rematando abajo y calentado los tendidos. Mató de media estocada y dos descabellos. Escuchó un aviso. Fuerte petición y vuelta al ruedo.

José María Manzanares saludó a su primero por verónicas ganado terreno. En el inicio de la faena de muleta blandeó en dos ocasiones. Por el izquierdo tuvo calidad, respondió al toque, metió bien la cara, pasó con regularidad y permitió alargar el muletazo sacándolos con lucimiento sin llegar a emocionar. Mató de pinchazo y estocada. Silencio.

Su segundo fue devuelto y salió un segundo bis, sobrero de Jandilla. Se entregó en varas mostrándose mermado después del encuentro. Pasándolo de muleta en el tercio a punto estuvo de coger a Manzanares, tardeó por el derecho, embistió con arreones y se defendió. Faena breve. Mató de estocada. Silencio.

Borja Jiménez saludó por humilladas y acompasadas verónicas a su primero, ganándole terreno y cargando la suerte. Fue cuidado en varas. Brindó al público. Inició con la muleta acariciando el albero con la tela, llevándolo poderosamente rodilla en tierra y cuajando cinco entregados muletazos por abajo. En el tercio lo pasó con empaque por el derecho, sin obligar del todo para mantener faena. Por el izquierdo, con el compás abierto y erguido, templó, se encajó, toreó con expresión, ligando a un toro entregado que siguió con codicia y transmisión la poderosa tela de Borja. Toro y torero en armonía. Mató de estocada algo delantera. Oreja.

Recibió a su segundo por suaves y templadas verónicas. Inició de rodillas con la muleta citando desde el centro del ruedo pasándolo por el derecho con emoción. Le dio su tiempo ente series. En los medios cabeceó al pasar, intentando quitarse la muleta. Insistió el torero consiguiendo sustraerle meritorios muletazos, a base de mucha exposición, sin poder compactar faena por la escasa transmisión del astado. Mató de estocada baja. Silencio.

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