Crónicas

En Dax… Día de resaca

Arènes de Dax. Tercera corrida de toros de las Fêtes 2024. Lleno. Calor intenso. Toros de Victoriano del Río. Doce puyazos, cuadra Bonijol.

Sébastien Castella: Silencio con aviso y silencio con dos avisos.

Morenito de Aranda: Oreja y oreja con aviso.

Andrés Roca Rey: Silencio unos pitos con aviso y silencio con aviso.

Detalles:

Presidente: Arnaud Imatte

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Después de la borrachera de la corrida de toros de Santiago Domecq, los espectadores del Dax vivieron un auténtico día de reseca (día de resaca). La falta de raza de los toros de Victoriano del Río nos devolvió a la triste realidad de las corridas de toros en donde toros y toreros carecen de deseos y potencial. No hubo fondo en los toros, un Roca Rey que no estuvo en su mejor forma y un Castella que no mató, estamos lejos de la euforia general y generalizada de ayer (jueves 17 de agosto). Sólo Morenito de Aranda al que le correspondieron los dos toros con más transmisión ha estado bien. Después de Vic, Mont de Marsan salió en hombros de un nuevo coso de primera categoría. El año 2024 es, en el suroeste, el año del torero apoderado por Jean François Pilès.

Los toreros

Sébastien Castella se empleó para canalizar a un primer victoriano brusco y falto de raza. La técnica habló pero la faena no transmitió nada, silencio. Al cuarto le faltó recorrido y motor. La faena de Castella ha sido mecánica y no emitió ninguna emoción. Como suele ocurrir este año, el francés mató mal y escuchó dos avisos. Nuevo silencio.

El lado derecho del segundo fue el mejor. Morenito de Aranda construyó por ese pitón una faena sincera y de calidad. La concluyó con una buena espada y se llevó el primer trofeo de la tarde. El quinto con comportamiento “hiératqiue” reculó dos veces al caballo luego acudió a dos puyazos muy prolongados mientras permanecía, como magnetizado, durante largos minutos contra el peto. Morenito de Aranda impuso a este manso con poder una faena poderosa y eficaz. Le cortó la segunda oreja de la tarde.

El tercero no tuvo ni virtudes ni malos modales. Andrés Roca Rey, que pareció ausente, manejó los aconteceres sin involucrarse. La espada caída y como el peruano no se dignó descabellar, la muerte del toro pareció durar una eternidad. Se pitaron a los dos actores. A Roca Rey y al último Victoriano les faltaron ganas y convicción. El peruano, visiblemente atorado, no insistió. Silencio para el torero, pitos para el toro.

Los toros

Correctos en la presentación, los de Victoriano del Río se mostraron discretos sobre el caballo y tuvieron poca transmisión en el tercer tercio. Sólo el quinto manso con poder con un comportamiento sorprendente sacó del aburrimiento a la corrida. Los otros cinco son para el olvido.

Toro a toro

Pocosol para Sébastien Castella

El primero mostró estar bien armado, aunque salía abanto. Sébastien Castella lo recibió de rodillas. Ya en varas, el toro salió suelto del primer encuentro y después se empleó un poco más en el segundo viaje al peto. Inició su faena con pases por alto, viéndose que el toro era brusco. Castella lo obligó por abajo. A la izquierda se detiene en la muleta. En la segunda serie, el francés se impone en la embestida del Victoriano. Regresó con la derecha, el toro reservón. Por el lado natural pase a pase, el toro se fue a menos. Serie encimista que no aportó mucho a una faena demasiado larga. Castella pinchó, un aviso. La siguiente fue una espada caidita.

Ebanista para Morenito de Aranda

Morenito de Aranda esperó al segundo a Porta Gayola. La recepción fue muy eficiente recortada por una media. Bien picado el toro acude a un primer puyazo ligero empujando sólo con un cuerno. El primer tercio finalizó con un picotazo. Morenito comenzó su faena de rodillas y luego continuó con trazos por la derecha. En la primera serie el toro viaja en redondo lo cual mostró que era noble. Por la izquierda el bicho estuvo falto de recorrido. De vuelta a la derecha y como al inicio de  la faena, va mejor el Victoriano. El final tremendista fue brusco pero abre la puerta al público. La espada contraria pero efectiva y Morenito le cortó una oreja.

Navegante para Andrés Roca Rey

La cabeza del tercero ha sido ofensiva pero el toro es chico, además de ser abanto. Andrés Roca Rey lo fijó y lo puso en el centro del ruedo. El victoriano se defendió en el primer encuentro con la cabalgadura. Luego fue brevemente picado en el segundo. Justo de fuerza cayó cuando fue lidiado a la salida del caballo. El torero impuso su voluntad pero se mantuvo a distancia del toro. Por la izquierda el Victoriano era soso y transmitió poco. Fue a menos sin que la faena hubiera comenzado realmente. La espada quedó caidita, Roca Rey tardó en descabellar. Unos pitos y luego silencio para el torero, pitos para el toro.

Vivero para Sébastien Castella

El cuarto fue cómodo de cabeza y justo de fuerzas, lanzaba miradas hacia las tablas tablas cuando salía de los capotazos de Sébastien Castella. Mal lidiado, no se empleó durante las dos reuniones reglamentarias. El segundo tercio es laborioso. Empezó con doblones eficaces mostrando que al toro le faltó recorrido. Con profesionalismo Castella tira del toro en derechazos que resultaron enganchados. La faena fue mecánica. Careció de transmisión. El bicho careció de raza. Una serie final, aunque enganchada, despertó al público. El final tremendista es embarullado. Sonó un aviso antes de la primera entrada a matar. Castella pinchó antes de meter una hábil estocada. El puntillero fue torpe. Se escuchó el segundo aviso. Silencio. Pitos para el toro.

Impuesto para Morenito de Aranda

El quinto salió andarín por el ruedo. Morenito de Aranda se propuso interesarlo en su capote. El toro caminaba con flema desdeñosa de un punto a otro del ruedo. Manso huyó de la puya por lo que el picador cambió de terreno y logró arrinconarlo. El toro se iluminó bajo la herradura y permaneció pegado al caballo durante mucho tiempo. Dejó muy marcado el primer encuentro. El segundo fue sólo un picotazo. El animal volvió a quedar como magnetizado del peto. Su comportamiento siguió siendo bizarro. El tercio de banderillas fue complicado. El toro conservó su fuerza. Morenito de Aranda dio inicio con inteligencia y le arrancó, citándole de cerca, derechazos meritorios que el bicho accedió a tomar. A la izquierda fue más complicado. Pero el torero ataca y terminó con una muy buena serie por la derecha. Morenito de Aranda pinchó, sonó un aviso. La espada quedó traserita pero ha sido suficiente. Oreja.

Jubilado para Andrés Roca Rey

El último fue bonito de cara. Metió la cabeza en la capa de Roca Rey; y después empujó, sin embargo, salió suelto. El segundo fue un picotazo. El toro persiguió a a los banderilleros hasta las tablas. Roca Rey dobló al toro con elegancia. El bicho anduvo suelto. Primera serie por derecha, el peruano no se cruzó mucho. El de Victoriano era noble, no obstante, pareció que al torero le faltó convicción. El toro fue hacia menos y la faena se detuvo allí. Roca Rey pinchó antes de matar con una estocada entera en buen sitio. Un aviso y cayó el último Victoriano de la tarde. Silencio para el torero. Pitos para el toro.

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