**Lo escribe Alberto Villarreal… Recordando a Raúl Contreras Finito, figura del toreo**

04 diciembre 2023 Redacción

Raúl Contreras Finito, nacido en la ciudad de Chihuahua, Chihuahua, México, el 6 de enero de 1947, falleció en la Ciudad de México el 4 de diciembre de 1974. Como se observa, fue conocido por el sobrenombre artístico de Finito.

En su temprana niñez cuando tenía escasos 10 años, por primera vez, le anunciaron para torear un festival en la plaza de toros Oriente, con los aficionados prácticos del pueblo. Lidió un becerro de la ganadería Los Rico. En aquel entonces, se le anunció como Raulito Contreras. Y desde ese día causó un impacto tremendo entre los aficionados que le sacaron a hombros.

Sus argumentos eran sólidos, de torero valiente, honesto, pundonoroso, lleno de pasión y entrega, con mucha casta. A los 14 años mató a su primer novillo, también en la plaza de toros Oriente, el astado fue de Begoña, de nombre Caramelito, al cual le cortó su primera oreja. Desde entonces se le veía ese valor, la necesaria pasión y la absoluta entrega.

Actuó muchas tardes en la plaza Santa María de Querétaro, con Manolo Espinosa, Alfonso Ramírez Caleserito, Ernesto San Román El Queretano y los hermanos Rangel, por nombrar sólo algunos de su generación; haciéndose en esta plaza el consentido, ya que varias tardes salió a hombros. Como también lo hizo en la plaza de Guadalajara de donde salió seis tardes consecutivas a hombros y una por la enfermería, pero con las orejas en la espuerta.

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También ganó un Estoque de Plata, y desde aquellos inicios comenzó a vivir un sinfín de percances, como la grave cornada en las arenas de monterrey en 1962 de la cual fue de una de las primeras cornadas que sufrió en su carrera una de las cornadas graves de la historia de la tauromaquia.

No obstante, una vez recuperado y con su acreditado valor y sus firmes deseos de convertirse en una gran figura del toreo, lo animaron a desplegar una interesante trayectoria novilleril en 1965 apoderado por la casa Valles, el licenciado Tomás Valles Hicks y el ingeniero Carlos Valles Hicks.

En ese año de 1965 llegó a ser el torero puntero y triunfador de los novilleros mexicanos avalado por los triunfos que cosechó en la plaza capitalina del Toreo. Con tan solo 17 años de edad estos éxitos le dieron el pasaporte para que el joven Raúl Contreras Espinosa Finito cruzara el Atlántico y se presentara ante la afición española, ofreciendo así sus primeras muestras de arte.

El 17 de junio 1965 fue su presentación en la Plaza Monumental de Barcelona donde la afición catalana vio al joven novillero azteca dar tres vueltas al ruedo, después de haber realizado una soberbia faena al primer enemigo de su lote, por lo que la empresa le repitió el 29 de junio, sin embargo, su primer toro le dio una cornada y se lo tuvieron que llevar a la enfermería.

Reapareció en Alicante en donde cortó cuatro orejas y dos rabos, realmente esa temporada novilleril en España, acabó con todos los novilleros que alternaron con él y al final sumó 40 novilladas, cortando 22 orejas y 10 rabos en tan solo tres meses, por lo que Don Livino Stuyck le ofreció ir a Madrid, cosa que no ocurrió.

A su regreso a México, tomó la alternativa el 31 de octubre de 1965 en la plaza de toros La Esperanza de manos de Joselito Huerta de padrino y como testigo Antonio del Olivar con toros de la ganadería La Laguna. En el toro de su alternativa cortó una oreja y dio dos vueltas al ruedo en memorable tarde.

Sin haber confirmado la alternativa en la Plaza México regresó a España haciendo una extraordinaria campaña en 1966 reapareciendo en Barcelona con Palomo Linares a quien Raúl le puso severo baño cortando dos orejas, de ahí toreo en otras plazas. Su apoderado, Tomás Valles Hicks, logró que le dieran la confirmación de alternativa en Madrid.

Sin embargo, cuatro días antes le habló el empresario al licenciado Valles para informarle que por un error de la imprenta que hacía los carteles, en vez de poner el nombre de Raúl Contreras escribieron el de Raúl García, quien también era mexicano por lo que no se llevó a cabo.

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Resultó que la empresa no se la quiso dar porque ya había muchas figuras en España y así no darle más importancia al mexicano. Consecuencia de eso hecho, el licenciado Valles anunció que Raúl estaba muy grave de hepatitis y que se iban a New York a que se atendiera y de ahí volvió a México.

Confirmó la alternativa en la Plaza México el 29 de enero de 1967, de manos de Juan Silveti y como testigo Juan García Mondeño, con un encierro de Torrecilla, el toro se llamó Saucito.

Su última tarde que calzó el terno de luces fue el 12 de octubre de 1974, en San Luis Potosí, alternó con Manolo Martínez, Eloy Cavazos, Chucho Solórzano, Miguel Villanueva y Curro Leal, con toros de De Haro. El público le entregó el trofeo, pero Raúl se lo dio a Curro Leal porque lo necesitaba más, ya que apenas empezaba.

Esa sería su última actuación en este mundo, ya que, el destino, lamentablemente le tenía preparada la tremenda huida; más tarde se supo de la noticia trágica del accidente automovilístico. Los médicos lucharon arduamente por salvarle, no obstante, él ya no tenía ánimo para seguir luchando, estaba muy dañado. Entonces el calendario marcaba 4 de diciembre de 1974.

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