En Ceret… Diego Peseiro abre la puerta grande
Céret (Francia). Segunda de la Feria “Céret de Toros”. Se lidiaron seis novillos de Alejandro Vázquez y Sánchez. Muy bien presentado. Tres cuartos de plaza.
Diego Peseiro: Oreja, oreja y ovación con saludos por el que mato por José Rojo.
José Rojo: Silencio y paso por la enfermería.
Leandro Gutiérrez: Silencio y silencio tras dos avisos.
Detalles:
El cuarto de nombre Hidalgo, herrado con el n° 20, colorado ojo de perdiz de capa y nacido en nov. 2018 fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.
Tras la muerte del segundo, paso por la enfermería José Rojo que, por tener mucha fiebre, no se le permitió seguir la lidia.
A la muerte del sexto, fue ovacionado el mayoral Francisco Quevedo Fernandez quien recogió una ovación.
Saludaron en banderillas Víctor Del Pozo Olivares y Gómez Campos ante el segundo.
Muy buena brega de Víctor Del Pozo Olivares con el sexto.
La ADAC otorgo el premio al mejor picador a Tito Sandoval quien pico al tercero.
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Continúo la Feria “Céret de Toros” con una muy buena novillada de Alejandro Vázquez y Sánchez, segundo hierro de Peñaraja. Muy bien presentados, los utreros, puro Carlos Nuñez en su físico y su comportamiento, hicieron las delicias del numeroso público presente a pesar de la fuerte ola de calor. Viniendo de lejos al caballo, pero sin empujar, se revelaron en el tercer tercio, encastados y exigentes. Transmitieron mucha emoción.
José Rojo tuvo una matinal difícil. Enfermo, febril, acudió a la enfermería tras pasaportar al segundo novillo de la novillada. El colombiano Leandro Gutiérrez se mostró abrumado por el nivel y la exigencia de sus dos oponentes. Además, mató mal. Diego Peseiro había sufrido mucho en Vic-Fezensac. Con los Vásquez estuvo excelente. Profesional, valiente, eficaz y elegante, dominó los tres novillos que tuvo que enfrentar y matar. Gracias a él, la casta del cuarto conoció a un torero para el sabor de los aficionados presentes en Céret.
El primero bien armado, suelto, tomó dos puyazos sin empujar. Diego Peseiro colocó tres buenos pares de banderillas incluyendo un excelente quiebro. El novillo fue noble, pero cortó de embestida, pasaba mejor por la derecha. Dos buenas series por la derecha. Con la izquierda el bicho fue peligroso. Volvió por el otro pitón, él de Vásquez se apagó demasiado pronto. Mató de una estocada contraria pero entera, descabello y cayó la oreja en una faena limpia y pulida y adaptada al novillo.
El cuarto es muy en el tipo de Núñez. Bien picado, recibió dos varas sin empujar, tampoco empujó en la tercera vara. Acudió de lejos con una bonita arrancada en la cuarta reunión. Recibió el picador Juan Ruiz Pérez las palmas del público. Ovación también recibió Diego Peseiro tras su tercio de rehiletes realizado con elegancia y eficacia. Inició su trasteo doblándose, el novillo resultó complicado por el pitón izquierdo. Por la derecha el portugués ligó una buena tanda. El novillo, encastado y exigente, puso en aprietos al novillero en la segunda serie por la derecha. Diego se cruzó con valentía y ligó naturales con soltura antes de tomar el estoque. Dejó una entera en su sitio y eficaz. Peseiro cortó una oreja tras una buena faena, certera y eficaz a un novillo encastado y exigente. Vuelta al novillo en el arrastre.
El sexto fue soberbio. Diego Peseiro corrió turno para afrontar el que correspondió a José Rojo. Otro novillo exigente. Fue mal picado, salió solo de la primera y segunda vara y se defendió en la tercera y cuarta. Buena brega de Víctor del Pozo. Inició su trasteo doblándose con el novillo. El de Vásquez fue complicado. El novilleo se entregó con la mano zurda pero el novillo protestó, Diego Peseiro acortó la faena y se fue a por la espada para dejar una estocada entera y eficaz. Fue ovacionado antes de salir por la puerta grande.
El segundo aplaudido de salida. Se defendió en la primera puya. Un picotazo solo recibió en la segunda reunión. José Rojo trajo a su oponente en los medios. Un poco tardo, entró mejor en el engaño por el pitón izquierdo. José Rojo no pareció estar en su mejor forma. Mató de una estocada entera y contraria pero eficaz. Fue silenciado y pasó por la enfermería en donde los médicos, tras un desmayo, lo trasladaron a la clínica de Céret.
Con palmas fue recibido de salida el tercero. Tito Sandoval dejó un gran tercio de varas en sus tres reuniones, aunque el novillo no empujó en exceso. Leandro Gutiérrez brindó al público. Empezó su propuesta con pases de pechos y el novillo resultó tardo en acudir. Con la mano diestra el colombiano no se cruzó y con la zurda solo dejó un medio pase y volvió por el otro pitón. Leandro continúo y finalmente ligó algunas tandas, pero solo duró una serie. El novillero nunca encontró el sitio y le faltó poder. El novillo encastado pedía mando y no lo hubo. Fue silenciado.
El quinto fue un novillo muy bonito, acudiendo en la cabalgadura sin empujar en sus tres acometidas. En el último tercio, Leandro Gutiérrez retrocedió en cada pase y no dominó el novillo. El astado tuvo buena condición y permitió más de lo que propuso el colombiano. Mató de una buena estocada entera pero tardó en echarse, el uso del verduguillo no fue la mejor suerte para él. Todo quedo en silencios.
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