En Las Sanjoaninas… buena tarde de rejones y forcados en el cierre

01 julio 2019 Redacción

Plaza de toros de Angra do Heroísmo (Isla Terceira, Azores), domingo 30 de junio. El aforo de la plaza se cubrió en sus tres cuartas partes. Cuarta y última de la feria de Sanjoaninas. Corrida de rejones a la portuguesa. Tres toros de José Albino Fernandes, de correcta presentación y de buen juego en conjunto, y tres de Joao Gaspar ( 4º, 5º y 6º), de mayor cuajo y presencia y de comportamiento más duro y exigente.

Cavaleiros:

Filipe Gonçalves: Vuelta al ruedo en los dos.

Joao Pamplona: Vuelta al ruedo y vuelta al ruedo.

Salgueiro da Costa: Ovación en ambos. No pudo dar la vuelta al ruedo al lesionarse un tobillo en su primero,

Forcados:

En tarde de alternancia de tres grupos de forcados, los de la Tertulia Tauromáquica Terceirense pegaron a los toros 1º y 4º (Tomás Ortins al segundo intento y Francisco Matos en el primero y de manera, respectivamente), los de Ramo Grande a 2º y 5º (Luis Valadao, a la tercera, y André Mourenço, a la primera y de manera soberbia), y los Luso-americanos a 3º y 6º (Michael Lopes lo hizo con valor al segundo intento en el 3º, mientras que fallaron repetidamente con el último.

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Las Sanjoaninas de 2019 se cerraron con una entretenida corrida a la portuguesa que tuvo bastantes momentos de interés, protagonizados tanto por los rejoneadores como por los miembros de los tres grupos de forcados que alternaron en el coso azoreño.

Las faenas más redondas se vivieron en la primera parte del festejo, precisamente con los toros de José Albino Fernandes, que dieron un juego más noble y manejable que los otros tres cuajados y hondos ejemplares de Joao Gaspar.

Así, Filipe Gonçalves lució más y mejor con el que abrió plaza, un cuatreño que fue a más y permitió al caballero del Algarve un toreo templado a la grupa así como embroques y batidas con frontalidad y limpieza. Más exigente fue el cuarto, un berrendo capirote de Gaspar con el que Gonçalves alternó fallos y aciertos en la misma proporción, aunque llegando al tendido con alardes y adornos.

El azoreño Joao Pamplona también se fue centrando según avanzaba la lidia del segundo, un noble astado de Fernandes que ganó celo cuanto más le pidió el jinete local, como sucedió sobre todo en los últimos encuentros con los ferros. El quinto se paró y se entregó poco, pero Pamplona puso todo su empeño para remontar las dificultades.

A Salgueiro da Costa le correspondieron los toros de mayor cuajo de cada uno de los hierros azoreños que lidiaron hoy en Terceira. El tercero, de Fernandes, fue un toro bajo y de gran movilidad con el que el jinete dinástico puso garra y clavó con ajuste sobre un excelente caballo con el hierro de Hermoso de Mendoza.

Se lesionó el tobillo derecho al recibir un fuerte golpe del tercero, por lo que tuvo que montar sin el estribo de ese lado para enfrentarse al último toro de la feria, un cuajado y hondísimo ejemplar de Joao Gaspar que pesó 588 kilos y que además no humilló en ningún momento, por lo que Salgueiro alargó su esfuerzo para encontrar lucimiento sobre todo en los últimos embroques.

La competencia entre los tres grupos de forcados anunciados fue uno de los grandes alicientes de la tarde para un público que aplaudió con fuerza sobre todo las pegas de Tomás Ortins y Francisco Matos, de la Tertulia Tauromáquica Terceirense, la excelente de André Mourenço, de Ramo Grande, y la del luso americano Michael Lopes, que hizo vibrar a los emigrantes de la colonia azoreña en California que poblaban los tendidos.

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