En Madrid… Oreja para Pepe Moral con un extraordinario adolfo
Las Ventas. 8 de junio de 2018. Trigésimo segundo festejo de abono. Tres cuartos de plaza. Toros de Adolfo Martín, de buena presentación y bonitas hechuras. Fueron bravos y encastados, de comportamiento parejo. Destacó el extraordinario quinto de nombre Chaparrito, al que al presidente del festejo le pasó de noche homenajear su camino hacia el cachetero con una merecidísima vuelta al redondel.
Manuel Jesús El Cid: Herido.
Pepe Moral: Silencio, silencio y oreja.
Ángel Sánchez, quien tomó la alternativa: Recogió un ovación tras escuchar el aviso, silencio y silencio.
Detalles:
Parte médico de Manuel Jesús El Cid:
Herida por asta de toro en tercio medio cara interna de muslo derecho, con una trayectoria ascendente de 20 cm., que produce destrozos en musculatura aductora y vasto interno. Es intervenido quirúrgicamente en la enfermería de la plaza de toros. Pasa al Hospital San Francisco de Asís. Pronóstico: Grave, que le impide continuar la lidia. Firmado: Dr. García Leirado
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El segundo de la tarde, para El Cid tras haberle sido devueltos los trastos. Al poco de comenzar su faena, el diestro resultó cogido. Una vez en el suelo, el toro se enzarzó con él, pero afortunadamente, no le corneó estando ahi. Más tarde, su cuadrilla comprobó que estaba cogido, y lo trasladó a la enfermería. Anteriormente, la lidia al toro fue de libro, y El Cid dejó buenas sensaciones en el tendido. Se lo llevó muy correctamente hacia el caballo, y ahí se lució.
Bastante más mansito salió el tercero de la tarde, al que se enfrentaba Pepe Moral. Lo mostró en el huyendo y quejándose en el caballo. Fue inteligente el torero haciendo la faena de muleta cerca de las tablas, donde más podía responder el animal. Sin embargo no fue así, el toro no tuvo opción alguna de ser toreado por lo que tuvo Moral que coger la espada para concluir con una buena estocada.
Mucha clase tuvo el quinto, para Pepe Moral, un toro veleto que tomó el capote encelado. El diestro lo recibió con verónicas de buen gusto. El brindis fue para el tendido. Comenzó la faena de muleta por doblones, mostrando la gran humillación que tenía el toro. Le exigió buena colocación para citarlo y cuando éste se arrancaba metía bien la cabeza. El tendido recibió la gran transmisión gracias a la casta del astado. Toreó al natural con mucha despaciosidad que valieron para seguir excitando a los asistentes. Tomó la espada pero pinchó al primer encuentro, antes de una estocada entera que hizo dar muerte al animal. Recibió la oreja por petición mayoritaria. A destacar la ovación al toro, que puso la piel de gallina a los asistentes.
Abría plaza Ángel Sánchez ya que tomaba la alternativa. El Adolfo metió la cabeza en el capote con celo. En el caballo no lo hizo mal, aunque le faltó algo más de pelea. La lluvia se hizo presente en Las Ventas durante la ceremonia de alternativa, en la que El Cid le prestó los trastos. Comenzó la faena por abajo, doblándose con el animal para conducir su embestida. Supo engancharlo en redondo con mucho temple, plasmándolo en una serie a cámara lenta. Probó por el izquierdo, toreando al natural de buenas maneras. El astado tuvo clase aunque fue exigente, ya que requería una buena colocación del que se puso delante. La transmisión sin embargo fue a menos y no terminó de cuajar la faena. Concluyó con una estocada bastante vertical.
El cuarto de Adolfo fue presto en el caballo, y el tercio de varas, así como el de banderillas, fueron vistosos. De la faena se puede decir que el toro aprendió rápido, y la labor que tuvo que hacer el nuevo torero, fue de intentar ponerse delante del toro y arriesgar, pero teniendo cuidado de la embestida de este ejemplar. Por ambas manos se lo pasó, como digo, con riesgo. Hubo altura de toro, y se notó que hasta el final aguantó todos los lances.
Cerró plaza un ejemplar que no dijo mucho en varas, y desde el principio de la lidia, mostraría que no tenía la bravura que habían tenido sus hermanos. Reservón el toro, no acudía al engaño como se esperaba, y eso imposibilitó la ligazón de una tanda. Ángel Sánchez lo intentó con justicia y por derecho, pero al astado no se le pudo exprimir más.
En resumen de hoy, los toros han ofrecido posibilidades de triunfo en sus faenas, ya que con celo, repetían con prontitud. Pepe Moral cortó una oreja en el último viernes de Feria. El Cid fue cogido en la lidia del segundo, y no pudo continuar con normalidad la faena. Esto es toreo, y esto es cultura. ¡Viva la Fiesta!
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